Santo Domingo.-Los hoteleros de la región Este están preocupados por el “crecimiento vertiginoso y sin control” de la población haitiana ilegal en esa zona del país, sobre todo en la provincia La Altagracia, donde proliferan barrios cada uno con un 60 por ciento de su población integrada por inmigrantes de esa nacionalidad.
La situación es tan alarmante -explican los empresarios- que en más de una ocasión han solicitado la intervención de las autoridades, sobre todo de Migración, pero la respuesta ha sido muy tímida, porque mientras pasa el tiempo la afluencia de indocumentados aumenta cada día.
En los polos turísticos de Punta Cana y Bávaro hay por lo menos 15 barrios, entre los que se encuentran los denominados “Haití Chiquito “ y “Kosovo”, ambos habitados mayormente por haitianos.
Otro sectores es el llamado “El Hoyo de Friusa”, un barrio donde otro “dolor de cabeza” para la comunidad son los puntos de venta de drogas.
Están también los denominados Barrio Nuevo, La Candela, Villa Palmera, Los Sumideros, Las Zanjas, Villa El Cerro y San Francisco, donde los haitianos son tantos que las Fuerzas Armadas tuvieron que emplazar una vigilancia permanente en la región, coordinada por un general.
Sobre esa situación, el presidente de la Asociación de Dueños de Hoteles del Este, Ernesto Veloz, reclamó la atención oficial para enfrentar ese problema, debido al aumento de la cantidad de ilegales haitianos y el número de barrios improvisados en la región, lo que da aspecto de arrabalización al entorno.
Dijo que los hoteleros, en una oportunidad, llegaron a proponer la construcción de viviendas para ubicar a esos extranjeros en determinados sectores de la región, pero la iniciativa no tuvo éxito por el desinterés de las autoridades para enfrentar la situación.
Sin embargo, Veloz explicó que esa situación no ha influido en la llegada de turistas a los hoteles de la región, la que sigue siendo uno de los principales destinos en el Caribe.
Devolvieron autobuses el 21 de enero
La avalancha de haitianos fue tan grande el mes pasado que los organismos de inteligencia, según datos obtenidos por EL DÍA, “devolvieron autobuses llenos de ilegales” que se dirigían a Higüey.
A propósito de la celebración del Día de La Altagracia, el 21 de enero, fue montada un operación dentro de las actividades dirigidas a disuadir y prevenir el cólera, como parte del programa sanitario puesto en marcha por las autoridades.
Eso evitó que aumentara el número de ilegales en la zona, porque se tenía la información de que la mayoría no retornaría a Haití.
fuente:EL DIA
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